estos dos días me reafirman en una mirada que lleva creciendo hace tiempo: la observación de los márgenes. en la poesía. en la vida.
abro la web de El País. leo algunas noticias. me escapo a la sección de cultura. y siento todo lo que allí encuentro lejano.
aquí, en valencia, me inicio en un paso seguro. esa observación de los márgenes. el gesto, la palabra de los amigos de valencia, me hace pisar firme.
conocimos a enrique falcón. y su mirada. y su gesto que nos empuja al margen de conocer lo que realmente nos vive.
abro la web de El País. leo algunas noticias. me escapo a la sección de cultura. y siento todo lo que allí encuentro lejano.
aquí, en valencia, me inicio en un paso seguro. esa observación de los márgenes. el gesto, la palabra de los amigos de valencia, me hace pisar firme.
conocimos a enrique falcón. y su mirada. y su gesto que nos empuja al margen de conocer lo que realmente nos vive.
mariano
2 comentarios:
querido mariano,
este comentario es para esta y la entrada anterior.
chico, así, contigo, sopear es maravillosamente fácil.
muchas gracias.
te queremos,
ò.
Mariano:
Qué bueno que lo pasarais bien; fue un gusto conoceros a Pepe y a tí. Ojalá la visita se repita prontito. Conocer a Quique Falcón es una experiencia de la que no se sale indemne ¿verdad? Coherencia entre palabra y vida que contagia sin proclamas ni violencias, invitación amorosa a mirar esos márgenes olvidados. Y tanta otra gente hermosa de Valencia: Víktor, Alicia, Jesús G...
Les esperamos hasta otra.
Un abrazo,
Laura.
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