
entiendo a pau
cuando dijo aquello
acerca de pantani:
los seres queridos
nos acompañan
un tramo corto o largo
no importa cuánto
hemos de asumirlo
de antemano
hasta que un día
a lo largo de la ruta
que parecería cotidiana
un día más
un día cualquiera
uno de nosotros
abandona la vida
y el aire nos ayuda
a que las lágrimas
vayan
quedando en el camino
a modo de lindísimos
y pequeños homenajes
y ojalá brote de la sal
que vamos derramando
esperanzadas
ramitas verdes
que quedarán
intermitentes
esparcidas en el viaje
que sigue
hasta que nos toque turno
y a otros les de por llorar
o por ganar la carrera
un poco por nosotros.
òscar
No hay comentarios:
Publicar un comentario