en esta instantánea, tomada en reciente reunión sonora intenso-almeriense, aparecen dos de mis más queridos musicólogos letrados a la par que coetáneos; dos señeras figuras de la trova arábigo-murciana: ahí, al trichello engomado, don tano beltrano, virtuoso y protonotario apostólico de ambos derechos (el 1 y el 2) enfrascado en su fino quehacer. a su izquierda, discreto y comedido, el barítono llopis, doctor y bolerista consumado. el momento es ignoto: ambos, en enjundiosa actitud, atacan un antiguo merengue dominicano con reminiscencias de madrigal francés recitativo, otrora proveniente de la chacota eslava. la obra si mal no recuerdo se titulaba, "ahí te viene la chansa, dominga, que yo vengo de fransia".
pepe
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