Cuando volvieron de Alemania
compró un piso nuevo y muebles
de primera. Quería que todo
fuese como antes pero
mejor, con dinero y más tiempo
para gastarlo. Pero nada era
ya lo mismo. Cuando ella decía
huerta, los hijos repetían
Gemüsegarten. Cuando ella decía
río, montaña, ellos pronunciaban
Flüs, Gebirge.Cuando ella decía casa,
ellos miraban, desconfiados,
hacia otro lado.
Berta Piñán, Idiomas. De La Mancadura / El Daño, Trea Gijón 2010.
pepe
4 comentarios:
Es una alegría ver por aquí a Berta, una de esas poetas a las que en esta casa llamamos "grande" con todo el convencimiento. ¡Qué bien que la estéis disfrutando también vosotros!
Pequeña errata: "Fluss..."
UF. Tremendo.
sí lo es laura, no la conocíamos. este poema es hermoso.
besos y hasta el viernes. hay muchas ganas de veros.
abrazos anay, nos vemos en la central?
pepe
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