anoche, en mi pueblo, se inventaron un shopping night. tremendo éxito. ríos de gente por la calle mayor. muy contento por los pequeños comerciantes, ojalá hicieran buena caja. claro, cómo no alegrarme; recuerdo cómo uno de ellos, al poco de haber llegado yo aquí, se tomó la molestia de llamar a mi timbre para avisarme que me estaban multando porque eran las cinco de la tarde y había que retirar el coche y a mí se me había pasado. el caso es que gracias a él evité la sanción. y gestos así con todos y todos los días...
pero el modelo no es este. flaco favor, a la larga. el pequeño comercio tiene la fortuna de NO ser un monstruoso centro comercial, una de esas chinches temáticas de nuestra sociedad dictato-capitalista. y ayer vi comportamientos idénticos en mis conciudadanos. y no, por ahí no.
es muy apetitoso entrar en esa rosca, pero está envenenada. salir del ocio consumista, de la esclavitud invisible de los pueblos.
lo de anoche, sé que se hizo con la mejor intención, para competir con los gigantes. pero necesariamente lo debemos hacer de otra manera. imitar estos modos es muy peligroso, refuerzan la mayor. estamos diciendo a nuestra gente que sí, que ése es el modelo válido, que hacemos cosas para ser como ellos. no, por favor, no es el camino. es justo al revés.
la enorme diferencia entre un aberrante centro comercial y un pequeño comerciante es clara: los primeros nos esclavizan como máquinas programadas - trabajar para gastar, mientras que los segundos son de los nuestros, son amigos en el día a día, estamos juntos y compartimos nuestras vidas con ellos.
sé que nos lo ponen difícil, comprendo que resulte tentador la oferta de precio y amplio catálogo de los malvados, pero nosotros debemos llegar al pequeño comercio por compañerismo... y si no les sirve esta dádiva, porque si no, los establecimientos chiquitos cierran e irremisiblemente nuestro pueblo pierde la batalla y muere un poquito. la calle se abandona, pierde la sociedad y adiós muy buenas.
sé que nuestro ayuntamiento hace lo que puede. compremos bien, comportémonos todos y todas como merecemos.
calidad, especialización, trazabilidad ética, solidaridad y compromiso.
ajuntament - petit comerç - conciutadans
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