Estamos agradecidos a nuestros antepasados porque no los conocemos.
Entre vivir algo y juzgarlo hay la misma diferencia que entre respirar y morder.
Uno necesita noticias sencillas, noticias escuetas que nos hablen de la vida de los
hombres de nuestra misma condición, aunque sólo sea para quitarle su espina mortal
al desengaño que ocasiona nuestro propio fracaso.
hombres de nuestra misma condición, aunque sólo sea para quitarle su espina mortal
al desengaño que ocasiona nuestro propio fracaso.
Lo más difícil será no odiarse a uno mismo, no sucumbir al odio a pesar de que todo
está lleno de odio; no odiarse sin motivo, ser justo con uno mismo como con los demás.
Uno no está nunca lo bastante triste para mejorar el mundo. Enseguida vuelve a tener hambre.
Elías Canetti, La provincia del Hombre, Carnet de Notas 1942-1972
pepe
2 comentarios:
Canetti, alumbrándonos el mundo un poquitin, preciosas estas selecciones que nos traes Pepe!
Un abrazo!
sigo tu blog y ya sé que también eres de la liga canetti.
es verdad que nos enciende la luz muchas veces. qué gran tipo.
otro abrazo para tí, bash!
pepe
Publicar un comentario