después de la sopa, regresar a casa. cansado, arrastrado por el mañana. les pedí a mis padres que me ayudaran en el traslado. el día 30 dejo el piso. quizás lo haga antes. para no hacer el salto de golpe, ellos irán llevando cosas a la casa. la otra. la de mis primeros treinta y tres años. esta tarde ya empezaron a llenar bolsas con libros, mi única herencia. algo de ropa, alguna manta llenando el espacio.
creo que hacía tiempo que no me rompía una imagen tanto.
esas bolsas arrojando la espera tan cercana.
mariano
Adiós
Esta es la tierra, donde el sufrimiento
es la medida de los hombres. Dan
pena los condes con su fiel faisán
y los cobardes con su fiel lamento.
La belleza nos sirve de tormento
y la injusticia nos concede el pan.
Un día brindaréis por los que habrán
convertido el dolor en fundamento.
Los que vivimos para dar alcance
a tan inmensa luz que hoy no podría
un dios mirarla sin quedarse ciego,
aún tendremos que agotar el lance:
arrojar al silencio la agonía
como quien tira el corazón al fuego.
Antonio Gamoneda
4 comentarios:
Hola, Mariano, Hola!
Mucho ánimo, Mariano...!
M.
¡Ánimo, Mariano!
bash
Mariano, coño... ¿Y no has pensado poner bombas lapa? Tendrías: 1.- cama, comida y techo gratis. 2.- el reconocimiento y aplauso de un nutrido sector de la población.
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