eran las tres. fabi me llama. aquí está diluviando. voy a buscarte. salgo de casa y apenas llueve. me siento en el coche y una impresionante cortina de agua me acompaña todo el trayecto. sube fabi. continua el diluvio. llegamos. vuelvo para casa. aparco. en cuanto levanto el culo del asiento deja de llover. ¿cuánto ha durado esta lluvia bestial? ¿treinta minutos? el cuenco de la terraza se ha desbordado.
a la misma hora, mariano conducía camino al aeropuerto. ahora ya está en su trabajo. pepe habrá mirado por el balcón.
òscar
4 comentarios:
Afortunadamente todos bien, a pesar de la lluvia.
Un abrazo.
sí, lola, todos regaditos...
besos,
ò.
pues si, chaval, he mirado.
pepe
ea
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