



hoy hice transcurrir la jornada a velocidad de crucero. trabajé la adaptación del cartel de sant jordi para las banderolas de la plaça de la vila (escribí "vida" en primera instancia). quise leer más de lo que leí el libro de maillard. hablé por teléfono media docena de veces para asuntos ordinarios. contesté cuatro mails. mientras, la cámara fotográfica iba fijándose en lo que ella quería. aun no salí de casa. así que los encuadres son de interior. a mí se me antojan muy distintas tomas, pudiendo abrir varias vías según cuál de ellas decidamos contemplar. recién salió un anuncio del tenista nadal. pensé: este muchacho... ¿será consciente de su tiempo?. ¿se hará preguntas absurdas?. es imposible hacer preguntas absurdas cuando la vertiginosidad falsa de lo que nos ocupa es rematadamente bobo. quiero decir, creo, que las preguntas absurdas eliminan boberías. quizás no sea así. deseo que el tenista se sienta bien, claro.
òscar
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