
dos veces. cinco. una. cada día. todos los días. me pasa algo en el cerebro. no me creo que sea la serotonina. sí creo que es lo que es, algo sin nombre, por inmemorial, perdido desde siempre. a veces golpea mi cerebro, toc-toc. ahora ya no es antes, cuando me vencía. decidí darle la bienvenida. le pongo té. sea la hora que sea. con galletitas. es como si charláramos. ella tan fuerte. yo tan decidido. tutora de mis miedos (qué más quisiera ella!), se los doy... antes era al revés... la crisis. graciosa ya. ya puedo verla así. me balda el cuerpo, las extremidades, me bulle la cabeza, me rompe, me tira, peleamos sin resistencia. aún viene. algo parecido a la suerte, que yo manejo, redistribuyo. es tan embaucadora. no me dejo. yo ya no tengo cerebro, después de tanto tiempo (¿22 años?). no es un texto para entender. sólo lee. ahora, con permiso, tengo que sacar al burro.
òscar

2 comentarios:
Preocupante lo que cuentas... menos mal que lo tienes a raya. Abrazos.
ya no, ya es un chiste, poca cosa...
abrazos, hack!
ò.
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