esta bitácora, aunque prefiero llamarlo bloc o mucho mejor cuaderno –o diario, masmejor–, digo, la lleno de apuntes como si se tratara, eso, de un cuaderno personal, ajeno a las miradas del otro. aunque a veces expresamente me dirija a tí. lo armo para desarmarme, como revisión continua de creencias, para echarle de comer al burro del yo, para no creerme, para montarme en mi autito de fe y chocarlo flojo contra un árbol, lo justo para romperle los faros. el árbol, sí, el auténtico ser vertical, mi vertedero municipal, mi sacerdote, mi curapajas.
por otra parte, eso de la trascendencia es un kilo de más en la mochila, así que la traigo aquí, donde las cosas duran lo que tienen que durar. ahorro papel y árbol y me pongo vaca y me trago lo que digo, rumiante, lo paso en un plís por los cuatro estómagos y aquí dejo esta boñiga caliente por si alguien que se llame igual que yo, o paco o como se llame, cree que tiene jardín propio y le sirve.
òscar
pd / sin foto que ya he dicho que está cargándose lo móvil.
por otra parte, eso de la trascendencia es un kilo de más en la mochila, así que la traigo aquí, donde las cosas duran lo que tienen que durar. ahorro papel y árbol y me pongo vaca y me trago lo que digo, rumiante, lo paso en un plís por los cuatro estómagos y aquí dejo esta boñiga caliente por si alguien que se llame igual que yo, o paco o como se llame, cree que tiene jardín propio y le sirve.
òscar
pd / sin foto que ya he dicho que está cargándose lo móvil.
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