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oscar pasó esta tarde por casa para tomarse un café y echarme un cable como buen blogger que es. solucionamos detalles, imprimimos los mensajes del concurso para verlos mañana con mariano antes de la cena y luego, encarna, él y yo, charlamos de cómo se puede seguir viajando sin viajar: por córdoba, desde luego. coincidimos en que estos días, a ratos, aún andamos por allí. hacía sol esta tarde en la casa, miguel entraba y salía a ver qué se merendaba. llamó mariano. le enseñé a òscar un regalo que encarna me trajo hoy: un cedé muy bien envuelto de poemas recitados por juan gelman. antes de cenar me salí al balcón y estuve leyendo un rato 777 de carmen camacho. el mirlo estaba silbando. se ha hecho de noche a las 9. qué más se puede pedir.
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pepe
3 comentarios:
qué fenómeno estás hecho, don suave, que leo el texto de buena mañana y ya píobaroja... viva el lujo (este lujo módico de tener lluvia y sol).
muak!
òscar - mariafernanda.
hola pepe:
me compré Claus y Lucas de Agota Kristof porque un no sé qué al leer tu entrada me llevó a él.
Pude acabarlo. Una experiencia dramática. Hice varias pausas para respirar hondo, para salir a flote, para salvarme.
Y lo más grave: hoy, muy cerca nuestro, en nuestro mismo idioma y en nuestra misma calle, existen dramas de similar naturaleza e intensidad, o superior, porque no están escritos y nadie los conoce; sólo luego, más tarde, saldrán a la luz en los diarios en forma de violencia de género, bebés en contenedores o estadísticas de muerte por sobredosis.
Mientras, seguiremos vivos en nuestras trincheras particulares.
Mientras, por fortuna, luce el sol y conocemos los mecanismos para aliviar el dolor (al menos los nuestros).
Saludos.
gracias a òscar y al guanche por la anchura con la que me regaláis.
abrazos
pepitu
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