
Me acerco hasta la puerta. El aire es frío
como el gélido lienzo de una cama vacía
y, aún conmocionado, lo acojo quedamente.
oooooooooooo
Hay pájaros cantando que, invisibles,
reclaman la atención hacia las hojas
que el bosque solicita. A ras de suelo
lo roza una neblina sin raíces.
000000000000
Procuro no pensar. Quisiera devolverle
la familiar mirada con que el bosque nos mira.
00000000000
Atento a lo contiguo, observo -me demoro-
la neblina inconsciente
000000000
Juan Antonio Bernier, Amanece en el bosque.
De Así procede el pájaro, Pre-Textos 2004
00000000
00000000
pepe

No hay comentarios:
Publicar un comentario